miércoles, 3 de octubre de 2012

Martes,20 de Enero del 2009, 7:30 A:M

 Barack Obama, nuevo presidente de Estados Unidos

Hoy tomará posesión del cargo de presidente de los Estados Unidos Barack Hussein Obama ,el primer estadounidense de color que se hace presidente, haciendo realidad  el sueño de Martin Luther King . Algo que parecía imposible para todos los que lo hemos vivido aquella época turbulenta y segregacionista. 

El acto culmen de la jornada es la ceremonia de investidura, toda una institución en la tradición estadounidense que consiste básicamente en la jura del cargo por el presidente sobre un ejemplar de la biblia, en las escalinatas del Capitolio.
Para esta ocasión, Barack Husein Obama -nombre completo con el que jurará el cargo- ha elegido el mismo ejemplar sobre el que prometió defender la Constitución Abraham Lincoln, con el que ya se han establecido paralelismos por su determinación a unificar el país.No hay nada de original en esta constatación. Sin duda es una de las ideas que suena con más fuerza en estos días. Dejemos, pues, a los cronistas contar el acontecimiento y a los analistas políticos sacar sus sesudas conclusiones y anticipos de futuro. A mí, me sugiere dos reflexiones que tampoco pretenden ser originales pero que creo vienen a cuento. 

La primera es la importancia de los sueños, de las utopías y de lo pre consciente  Desde los griegos hemos hecho de la racionalidad humana uno de los rasgos definitorios de nuestra condición humana. Pero ¿es eso verdad? Los científicos neurocognitivos lo cuestionan seriamente. Aunque no hace falta ir tan lejos: esa racionalidad de la que nos jactamos la estamos negando todos los días con nuestra propia conducta. Basta con observar. 


"Una cosa es tener las metas claras y otra alcanzarlas. Pienso que los ciudadanos de a pie no somos conscientes de lo difícil que es para los grandes políticos el cumplir sus objetivos. Y que por eso hemos de dejar enfriar prudentemente las expectativas levantadas por el nuevo presidente (lo será en unas horas). No terminemos decepcionados cuando debiéramos seguir estando esperanzados. Si el “dream” de M.L.King se pudo cumplir, en cambio no existe el “one way of succes”. No existe el camino, la ruta segura de éxito. Algo que los matemáticos llaman algoritmo. Lo que distingue la vida social y por tanto los problemas sociales de los restantes problemas es que somos imprevisibles. La incertidumbre la generan los otros, dijo John von Nneumann). Esa incertidumbre forma parte del juego social. Ese es- como me hizo ver un día el sabio y entrañable Jose Luis Pinillos, uno de los padres con Yela de la psicología social española- uno de los rasgos que caracterizan a los problemas humanos. 
Las limitaciones no están en nuestra voluntad ni en nuestros sueños, pero sí lo están en nosotros, en la medida en que no somos seres aislados, sino conectados al mundo. Y las conexiones de la vida social unas veces nos ayudan pero la mayoría nos enredan y nos incapacitan. Que le pregunten a Lula. ¿La presidencia de Brasil le ha permitido cumplir sus sueños de sindicalista? A lo mejor sería más correcto decir que algunos de los vicios de su país se han instalado a veces en su propio gobierno. Obama tampoco va a tener las manos libres. “Presidente si hace eso molestará al lobby de … (póngase aquí lo que se considere más pertinente). “Presidente … romper el bloqueo de Cuba no es prioritario, dejémoslo para una segunda fase”. “Presidente no puede cabrear a todos los grupos de influencia al mismo tiempo…al menos periodifiquémos los objetivos. No podemos ganar si abrimos tantos frentes….” 
Los que trabajamos en estrategia sabemos que es más difícil hacer bien la cosa correcta que el hecho de identificarla. Pero ello no niega que saber lo que hay que hacer sea el principio de la grandeza. Buenas metas merecen buenas estrategias. Lo malo es que los modelos de que disponemos no están a la altura de las circunstancias. La Estrategia (con mayúsculas ) que hemos heredado no esta la altura de las circunstancias. Por eso, algunos heterodoxos estamos trabajando en una nueva teoría estratégica .Me gustaría pensar que esta Nueva Teoría Estratégica le hubiese ido bien al Presidente Obama …Lo malo es que no la conoce. No es su culpa, sino la nuestra (y de todos aquellos que han hecho del castellano una lengua académica de segundo orden)". Al parecer el cambio ha llegado a este país que lastimosamente durante muchos años fue racista .